Domingo, 16 de Enero de 2011
Domingo de luz, rapsodia azul, que diría el poeta. En un día así, cualquier acercamiento para disfrutar de la naturaleza resultará un éxito. Además, las cumbres que rodean el Valle de Cabuérniga, generalmente despejadas, hacen que el sol luzca radiante en ellas, con lo que el disfrute es mayor.
El circuito que realizamos este día lo constituyen varios tramos que han sido parte de otros circuitos anteriores. Partiendo de la Casa del Tío Mero, de Ucieda, hemos realizado la Ruta de los Puentes, y de Lamiña hemos partido o llegado a este pueblo, dando la vuelta por la cuenca del Arroyo Barcenillas o por la del Viaña.
Esta vez hemos partido de Ucieda, desde el puente cercano a la citada Casa del Tío Mero, hemos subido hasta el Alto de Leonzón y, por el Coteru Pandiucu y el Alto de Piedrafiesta nos hemos plantado en el Cuetu La Forcáa para, desde aquí, descender hasta Lamiña, pasando por La Corva y San Fructuoso.
El día ha amanecido despejado. Hemos comenzado sin ver el sol directamente, aunque, en el horizonte se notaba la claridad del amanecer. Enseguida hemos empezado a ver el sol sobre las cumbres y sobre nosotros mismos, alargando nuestras sombras sobre el piso.
La Subida hasta el Alto de Leonzón es continua, sin apenas repechos y no se hace larga. Llegados al paso canadiense que separa del término de Viaña, abandonamos la pista y por las rodadas o, sencillamente por la alfombra verde de que están cubiertas estas cumbres, siguiendo la alambrada de separación de vertientes, vamos subiendo y bajando, hasta llegar al Cuetu La Forcáa, desde donde empezamos a descender. Antes de coger la pista que, por la Corva, baja hasta Lamiña, paramos para comer y disfrutar del sol, algo por lo que veníamos suspirando en los últimos tiempos.
La bajada, como otras veces, se nos antoja larga.
En todo el recorrido, sólo hay dos momentos de elección de ruta: una, subiendo, donde encontramos una desviación a la derecha y tenemos que seguir de frente, y otra, bajando, cerca ya de Lamiña, donde hay que girar a la izquierda.
El recorrido total es de unos diecisiete kilómetros, salvando un desnivel de 600 mts.
Esta es la localización de la zona.
Comenzamos en sombra
Domingo de luz, rapsodia azul, que diría el poeta. En un día así, cualquier acercamiento para disfrutar de la naturaleza resultará un éxito. Además, las cumbres que rodean el Valle de Cabuérniga, generalmente despejadas, hacen que el sol luzca radiante en ellas, con lo que el disfrute es mayor.
El circuito que realizamos este día lo constituyen varios tramos que han sido parte de otros circuitos anteriores. Partiendo de la Casa del Tío Mero, de Ucieda, hemos realizado la Ruta de los Puentes, y de Lamiña hemos partido o llegado a este pueblo, dando la vuelta por la cuenca del Arroyo Barcenillas o por la del Viaña.
Esta vez hemos partido de Ucieda, desde el puente cercano a la citada Casa del Tío Mero, hemos subido hasta el Alto de Leonzón y, por el Coteru Pandiucu y el Alto de Piedrafiesta nos hemos plantado en el Cuetu La Forcáa para, desde aquí, descender hasta Lamiña, pasando por La Corva y San Fructuoso.
El día ha amanecido despejado. Hemos comenzado sin ver el sol directamente, aunque, en el horizonte se notaba la claridad del amanecer. Enseguida hemos empezado a ver el sol sobre las cumbres y sobre nosotros mismos, alargando nuestras sombras sobre el piso.
La Subida hasta el Alto de Leonzón es continua, sin apenas repechos y no se hace larga. Llegados al paso canadiense que separa del término de Viaña, abandonamos la pista y por las rodadas o, sencillamente por la alfombra verde de que están cubiertas estas cumbres, siguiendo la alambrada de separación de vertientes, vamos subiendo y bajando, hasta llegar al Cuetu La Forcáa, desde donde empezamos a descender. Antes de coger la pista que, por la Corva, baja hasta Lamiña, paramos para comer y disfrutar del sol, algo por lo que veníamos suspirando en los últimos tiempos.
La bajada, como otras veces, se nos antoja larga.
En todo el recorrido, sólo hay dos momentos de elección de ruta: una, subiendo, donde encontramos una desviación a la derecha y tenemos que seguir de frente, y otra, bajando, cerca ya de Lamiña, donde hay que girar a la izquierda.
El recorrido total es de unos diecisiete kilómetros, salvando un desnivel de 600 mts.
Esta es la localización de la zona.
Y este el esquema de nuestro recorrido
Comenzamos en sombra
Pero la claridad pronto aparece en el horizonte
Y, enseguida, el sol luce sobre nosotros, alargando nuestras sombras
Y sobre las cumbres que nos rodean
Después de celebrar este conceju, desecharemos la desviación de la derecha
Reponemos fuerzas convenientemente
Como por este paso no transita el ganado, decidimos seguir campo a través
El Collado Carmona, las Sierras del Escudo y del Cuera
Picos de Europa y Sierra de Peña Sagra
La Concilla y Alto Campóo
Andar por esta alfombra es una verdadera delicia
Bajamos del Cuetu la Forcáa buscando el bocadillo
Y damos cuenta de él rápidamente
Una vista parcial de una de las más hermosas brañas que rodean el Valle de Cabuérniga
Y, en las proximidades de Lamiña, torcemos a la izquierda, dejando de lado el camino de Barcenillas
Y nos despedimos hasta la próxima, que será por la Sierra de Cabarga